5 Estilos de co-paternidad

384

Cada situación de co-paternidad compartida es única, por lo que tener a su ex viviendo en el mismo techo no sea el mejor de los casos. Pero el objetivo debe ser constante: los niños se benefician de la cooperación de los padres. Esto se logra a través de una estrategia de crianza compartida.

Coparentalidad

¿Es posible entre usted y el padre de sus hijos? Creo que es posible. ¿Será fácil? A menudo no, pero apuesto a que estás dispuesto a esforzarte ya que amas a tus hijos y sacrificarías cualquier cosa por su felicidad. Así que eche un vistazo a estos 5 enfoques de crianza compartida y qué hacer si no parece que la crianza compartida sea una opción.

Los diversos métodos de crianza compartida

¡Voy a usar el libro de Tammy Daughtry Co-Parenting Works! Como mi fuente para estos cinco ejemplos de cómo los padres pueden (o no) cooperar y cómo afecta a sus hijos:

Amigos perfectos

Alta interacción y comunicación. El hecho de que los padres parezcan estar casados pero residan en hogares separados es desconcertante para el niño.

Mujer con camisa gris de manga larga sentada al lado de un niño con suéter azul

Colaboradores cooperantes

Hay una interacción moderada con alta comunicación. Este es el enfoque de crianza compartida que más beneficia al niño en general.

Asociados enojados

En este caso, hay poca interacción / comunicación moderada. Cuando los padres están enojados entre sí, la situación puede volverse muy tensa y asustar al niño.

Enemigos ardientes

Hay poca interacción y comunicación aquí. Cuando los padres se comunican, generalmente se convierte en una discusión, lo que causa una gran cantidad de estrés para los niños.

Padres libres discutiendo frente a una foto de archivo infantil

Dúos disueltos

No hay conversación o interacción entre los padres. Esto con frecuencia resulta en la parentificación, en la que el niño termina cuidando al adulto sin obtener lo que necesita.

En situaciones como esta, puede ser difícil separar la responsabilidad de la emoción. Sin embargo, crea un ambiente seguro para que los niños florezcan cuando los padres pueden dejar de lado sus diferencias en beneficio de sus hijos. Aunque esa situación es ideal, no todos pueden manejarla.